Este mes de Junio tenemos dos novedades, una para ayudarnos espiritualmente y otra para ayudar a los más pequeños de la casa a crecer en los valores como es la amabilidad.
EL ALIENTO DE LAS MARIPOSAS. Espiritualidad para tiempos líquidos es el nuevo libro de Alejandro Fernández Barrajón. Con su estilo personal, siempre cercano a sus lectores, nos invita a descubrirnos como seres espirituales porque en el mundo de la espiritualidad todos tenemos cabida: creyentes y ateos, jóvenes y ancianos, consagrados y esposos, sacerdotes y laicos… La vida espiritual se refleja en cómo entendemos lo que nos rodea y cómo nos entendemos a nosotros mismos. “Si queremos atravesar el desierto del yo hacia el oasis de la espiritualidad, tenemos que tomar una determinación, como decía Teresa de Jesús, demostrar interés por escuchar más hacia dentro que hacia fuera” . Y para el cristiano, la vida espiritual pasa por reconocer la fuerza y la bondad de la presencia de Cristo en su existencia.
“Solo desde la gratuidad es posible comenzar el itinerario espiritual”, dice Alejandro Fernández Barrajón. Nuestra vida
está llamada a dar frutos y la vida espiritual es el camino que debemos andar para llegar al destino que queremos alcanzar, si de verdad deseamos vivir en plenitud.
Para el autor, la espiritualidad es “una experiencia sencilla para gente sencilla”, por eso nos habla de sus experiencias personales, de sus dudas, de sus quejas, de sus alegrías, … Y si todos podemos vivir una vida espiritual, ¿cuándo somos seres espirituales? Eso es lo que nos muestra en “EL ALIENTO DE LAS MARIPOSAS. Espiritualidad para tiempos líquidos”.
EL METRO DE LA AMABILIDAD es un pequeño cuento destinado al publico infantil, en que se aborda de manera divertida el tema de la amabilidad, es para los más pequeños, a partir de los 4 años.
La autora Chiara Sorrentino y la ilustradora Barbara Bongini con este pequeño libro El metro de la amabilidad propone comunicar que la amabilidad es sin duda el mejor vestido. La historia se desarrolla al estilo de un cuento de hadas, donde los niños se pueden divertir. Pero al mismo tiempo el cuento se propone una enseñanza: Las palabras y los gestos amables pueden tener un efecto positivo en las personas. Eso es lo que se propone enseñar el pequeño caracol que quiere viene en ayuda del pobre sastre después que la princesa Chispita Veleidosa lo hecha de palacio.
La idea de un instrumento mágico que mide la bondad nació con la intención de potenciar una disposición que, aunque interior, se traduce en hechos concretos como potenciar: la amabilidad empatía superación de las dificultades, colaboración, respeto por todos los seres vivos…
El hecho de que sea a un pequeño ser vivo, como es el caracol, de los que a menudo son ignorados, expresa la importancia del respeto hacia todas las criaturas, y las ventajas de ir más allá de lo superficial para descubrir el lado profundo de las cosas.
Es precisamente gracias a una actitud sensible y atenta hacia el caracol que el protagonista descubre su magia. Una magia que desenmascara los engaños de la apariencia y que se realiza plenamente con el compromiso y la colaboración.
El caracol propone una nueva escala de valores para realizar la ropa, en la que la imagen interior se proyecta en la exterior: vestidos bonitos para quien es amable y altruista y vestidos feos para quien es grosero y egoísta. La amabilidad es sin duda el mejor vestido que se puede elegir para ponerse y apreciar cuando quien lo lleva son los otros.
En la cubierta del libro encontramos un QR donde podemos descargar distintas actividades y juegos con los más pequeños. También se pueden inventar otras actividades a partir de las que aquí se encuentran de modo que los más pequeños aprendan cosas de una forma amena y divertida. Se trata de ayudar a los niños y niñas a despertar la creatividad creando nuevas historias.
Creceremos tantos adultos como niños con estas preciosas ayudas.
