El día 26 de enero 2020 siguiendo el tema de nuestro capítulo “Levántate y ponte en camino… (Dt 10,11)” y la llamada del Papa Francisco para celebrar el 3er domingo del año litúrgico, como domingo de la Palabra de Dios, hemos querido salir de nuestra comunidad y señalar este día con la importancia de la Palabra en la vida de cada feligrés de la Parroquia de San Juan Bautista, en la calle de Faustina Peñalver, Madrid. Hemos celebrado este día con toda la Iglesia, “un domingo completamente dedicado a la Palabra de Dios, para comprender la riqueza inagotable que proviene de ese diálogo constante de Dios con su pueblo” (Aperuit illis, 2).
Domingo de la Palabra de Dios
En todas las eucaristías hemos llevado la Biblia –Palabra de Dios– en procesión hasta el altar para entronizarla, pues es el lugar donde reposa la Sagrada Escritura. Junto con las flores, porque evoca la vida que brota de quien acoge la Palabra. Y las velas encendidas, que nos recuerdan que la Palabra de Dios es luz para nuestra vida.
El párroco, Don José María Tena, junto con Don Carlos Alberto Rivas López (Vicario Parroquial) y Don Pablo Tena (Colaborador), han subrayado la importancia de la Palabra de Dios siguiendo el Evangelio del día (Mt 4,12-23), que relata el inicio del ministerio público de Jesús, diciendo: “Convertíos, porque está cerca el Reino de los cielos” (v.17).
Jesús está muy cerca de nosotros a través de su Palabra, que nos habla cada día. Jesús pasa por nuestra vida tal como invitó a los primeros discípulos Santiago y Juan. Y en el camino todo cambia, no quedamos igual, porque el que sigue a Jesús ya no vive para sí mismo, sino para el Reino. Dios ofrece un camino y el hombre acepta la propuesta de Dios.
Palabra de Dios en nuestra vida
Esa respuesta que damos a la propuesta de Dios es como dar un salto en vacío, un salto de confianza y de fe en Jesús. Porque Jesús viene a levantarnos, en el lugar donde estamos y tal cual somos.
Por eso este domingo nos invita a responder de la misma forma que los primeros discípulos del Señor, a escuchar la Palabra de Dios que nos habla de la vida, que nos ilumina en nuestra oscuridad y que nos guía en nuestro caminar.
Y al concluir la homilía, ha invitado a los feligreses a dejar abierta la Biblia en nuestras casas, para que cuando pasemos sea un recuerdo de la Palabra de Dios en nuestra vida.
Agradecimiento
Al final los sacerdotes de la parroquia han agradecido a las hermanas Paulinas por animar la liturgia, y por regalar a cada persona el método de Lectio divina, para seguir reflexionando la Palabra de Dios en nuestra vida.
Y han subrayado la misión de las Hijas de san Pablo (Paulinas), que es dar a conocer la Palabra de Dios y anunciar a todos el camino luminoso de la vida, que es el Evangelio de Jesucristo.